La falta de lluvias y la disminución de los niveles en los embalses han llevado a la necesidad urgente de ajustar los hábitos de consumo para evitar una crisis mayor.
La situación de los embalses de Chingaza, que suministran agua a Bogotá y municipios cercanos, es crítica tras un nuevo descenso. Al 25 de agosto, los niveles bajaron al 50.4% de su capacidad.
Desde el Concejo de Bogotá exigen una vez más la renuncia de Leónidas Narváez, ya que el deprimido de la calle 72 no será entregado el 8 de octubre de 2024 como se había anunciado.